Hola amig@s de Habib BA.
Os pasamos una carta preciosa que una persona anónima nos ha dejado para Habib.
Un beso a todos y que paséis unas buenas vacaciones sintiendo el amor y la vida que hay en vosotros. Nosotros seguiremos aquí acompañando a Habib lo mejor posible.
Soy una de esas muchas personas anónimas que no te conocen de nada, sin forma, sin voz, ni parecer, pero que quieren que te recuperes.
Quisiera además compartir estos dos pequeños textos que escribí hace tiempo:
Sobre el dolor
No hay que detenerse sobre el dolor, no es preciso entretenerse en él; pero sí tal vez profundizar y reintegrarse a través de ese punto certero en donde está la belleza, el amor y la perfección del Espíritu que anima ese cuerpo incluyendo ese dolor. A veces, ese punto te arrastra hacia sí, tanto que dejas de ser ese cuerpo y ese dolor que acompaña al cuerpo también. Puede que sólo sea un lapso muy corto, como un pequeño destello o apertura, pero basta con eso para comprender que es desde ahí desde donde se vive, y también desde donde todo acaba por disolverse.
Dar y recibir
Dar y recibir, son en verdad la misma cosa.
¿Cuánta entrega hay y de cuántas maneras se ha de expresar?, no sólo son las obras las que reflejan ese amor, sino la perfecta comunión entre los seres, pues no te da más un árbol o el sol que alguien que vela por ti cada noche cuando enfermas, no da más alguien que no pudo rodearse de muchos, que uno que recibió en su casa a legiones. Porque el amor es siempre absoluto, y desciende sobre aquel que se encuentra rozando con sus pies sobre la tierra, sobre aquel que aún piensa que no lo encuentra en ninguna parte, sobre los que duermen el sueño profundo y también sobre los que sufren, ellos también son amados. La verdadera redención es ser consciente de que no lo has perdido nunca y de que no lo puedes perder, así cada pequeña cosa que tú veas y toques, cada cosa que se halle en ti y delante de ti no ha de estar exenta de esa esencia, emana perse, acompañando en este tránsito, sin importar la forma en que aparente ser representado.
Aunque siempre estoy aislada, eso no me impide comulgar a cada instante con cada uno de los seres a los que acompañe, puedo amar tanto a una hoja, una brizna de paja, a un árbol, a la piedra que se introduce en mi zapato, tanto como a cualquiera de los seres que se me cruzan cuando camino, y bien sé de mi torpeza para esto o de mi extremada sencillez, pues sólo se amar en las cosas pequeñas y no en las grandes obras que uno debiera emprender, no en el hablar o en el estar presente frente al otro, pues siento que nada hay que deba comunicar, sólo lo presencio en toda su plenitud. Mas si hay algo que me conmueve de veras es no poder hacer más por todos, dada mi torpeza, o no poder contener mucho más para vosotros, sé de mi falta de medios para no poder comunicarme, para apenas saber qué decir, sólo os acompaño y habito con vosotros como humildemente sé, ya sea en mi recuerdo o en la forma en que cada uno se manifieste y requiera de una palabra o sólo de estar ahí sin necesidad de nada más. A veces siento que me olvidé de las obras, del no dar más en el sentido de comunicarme a viva voz, con el estar allí con vosotros de forma directa, pues no son los cuerpos los que se unen o los que te aproximan más al otro, sino la forma en que cada uno da, tan singular y propia pero en esencia, tan igual, tan absoluta y tan perfecta...
Hay muchas formas de dar y de recibir, y muchas maneras de transmutar el dolor Habib. Deseo que te recuperes, a pesar de no conocerte de nada.
Un abrazo para tí y para todos tus seres queridos, que te acompañan en este transitar.
Gracias por existir.